martes, 6 de abril de 2010

10. El amor es como el agua salada; cuanto más se bebe, más sed da.

Hola amig@s:
Siento que no han entendido bien mi relación con Bruno. Él no es un patán, como tu amigo Camila. Cuesta trabajo entender qué haces saliendo con un chavo de esa calaña. Tipos como este que describes sobran y sólo hacen infelices a las mujeres, además de meterlas en líos. Embarazarse de un fulano así es realmente triste.
Aunque Marcos opine que las mujeres somos desesperantes, así en plural, quiero aclararle que no todas somos iguales. Yo me sé cuidar. Además, Bruno es diferente, se preocupa por mí, me acompaña a todos lados, está involucrado en la relación, trata de hacerme feliz en cada momento y lo consigue. Tuvo sus malos ratos, que me afectaron profundamente, lo reconozco; pero, afortunadamente, ahora es otra persona.
Mi compañero es un chavo muy atractivo, no es nada feo, todas en el salón quieren con él y me da mucho gusto que se haya fijado en mí. Creo en el amor y no espero, como comenta Margarita, que en este momento de la historia, en pleno siglo veintinuno, un compañero de estudios tenga que proponerme un compromiso serio cuando todavía nos estamos conociendo. Vivimos ya el bicentenario de la Independencia, el centenario de nuestra Revolución, y cada día nos desayunamos con noticias de avances técnicos sorprendentes, como el hecho de que se han logrado acelerar partículas con energías similares a las que ocurrieron en el Big Bang, en el origen de los tiempos. No podemos vivir nuestra vida como en tiempo de nuestros bisabuelos que no conocían ni el teléfono.
Estoy de acuerdo con Anahí. Es necesario tomar control de nuestra vida y no permitir que sea el otro el que decida nuestro destino. Reconozco que me he dejado llevar por mis impulsos y no he sido capaz de poner un hasta aquí a todo esto. Desgraciadamente, mis emociones fueron más fuertes que yo; sin embargo, creo que ya es demasiado tarde para echar marcha atrás. Soy feliz y, por primera vez en mi vida, siento que he dejado de existir, para vivir realmente.
Con respecto a la culpa, creo que ésta es una parte esencial de la educación. Yo siempre me he sentido culpable. ¿De qué? preguntarán. De todo.¿Ustedes no? Supongo que estarán de acuerdo conmigo que es imposible vivir de espaldas a este sentimiento agobiador.  
Un beso, Miranda  

4 comentarios:

  1. conozco una chava que tiene novio, esposo y amante y no se siente culpable

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  2. Jimena, se ve que tu amiga es muy polifacética.
    Pero, yo insisto, la culpa debe estar ahí. No crees?

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  3. Miranda, es agradable leerte, me refresca lo que escribes, y es cierto lo que dices, el amor es contagioso, entre mas tienes mas quieres, como el agua salada, me encanta tu blog.

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  4. Gracias filósofo.
    Me he desentendido un poco del blog, pero me propongo seguir adelante con esta historia que me trae con la cabeza hecha un lío.

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